Hoy jueves por la mañana, la ciudad de Deán Funes se vio revolucionada por una actividad inusual, hasta el momento, pero que llegó para quedarse: Las motos que no cumplan los requisitos para circular y que tengan escape libre van a ser trasladadas en un carro hasta un depósito municipal.

 

Allí, les quitarán el caño de escape, el cual luego será destruido, y recién ahí serán devueltas a sus dueños siempre y cuando presenten la documentación adecuada para retirarlas. 

 

Toda esta situación viene como desenlace de la Ordenanza N. 3098 que establece el secuestro preventivo de aquellas motocicletas que no tengan el caño de escape original y aquellas motos que no tienen chapa patente o que estén mal estacionadas. Según lo que establece esta ordenanza, en el lugar en donde los inspectores municipales encuentren motos en ese estado, podrán retirarlas del lugar, silbatazo previo, pero sin la obligatoriedad de que se presente el propietario del vehículo. Es decir que, la moto podrá ser “cargada en el carro”, sin la necesidad de que se notifique de manera presencial en ese momento al dueño. 

 

En la jornada de hoy, hay decenas de motos que ya han sido trasladadas al depósito y se espera, según lo informado desde el área de inspectores municipales, que el número crezca exponencialmente con el correr de los días.