Un festival no solo es un momento de encuentro entre la gente y la cultura de un pueblo, sino que, además, es el escenario ideal para el diálogo político entre los referentes que asisten.

 

Uno de esos fue el Festival del Cabrito y la Artesanía 2024, que contó con una fuerte presencia de legisladores, intendentes y jefes comunales de la provincia.

 

Quizás, la más destacada, fue la del presidente de la Agencia Córdoba Turismo, Darío Capitani, quien se instaló durante todo el fin de semana en Quilino para participar del evento.

 

“Mientras disfrutábamos del festival, nos enteramos de que existe un proyecto para desarrollar entre el sector público y privado el norte. Eso es lo bueno que poseen los festivales, que podés dialogar y gestionar silla de por medio con funcionarios provinciales o nacionales”, indicó a Mirá El Norte, un jefe comunal de la región.

 

De acuerdo al filamento de la conversación que incidió frente al escenario “Chango Rodríguez” y que se trasladó hasta la carpa de las autoridades, el gobernador Martín Llaryora tiene decidido potenciar la cultura y el turismo de todos los departamentos del norte a través de inversiones privadas.

 

Si bien el proyecto aún es un bosquejo en gestación, la idea seduce a los intendentes y jefes comunales que por el momento tenían el enfoque de la gestión en atravesar la crisis nacional.

 

En el análisis tampoco no hay que dejar pasar la convocatoria que tiene la figura de la intendenta de Quilino y Villa Quilino, Mabel Godoy, la dirigente que pertenece al sector político de Alejandra Vigo.

 

“Durante las tres noches de festival pasaron cerca de 20 funcionarios de la región y de la provincia. Eso denota la importancia de la figura de Mabel Godoy a la hora de convocar”, soltó otro dirigente del noroeste provincial que asistió.

 

En síntesis, por contexto y trascendencia, el festival de Quilino y Villa Quilino fue exitoso desde la arista que se lo observe.