Ayer, un día antes de este evento, el equipo de salud había efectuado una asamblea que había durado toda la jornada y habían anticipado que luego (por hoy) iban a realizar un paro como protesta por los salarios y jubilaciones que recibe el área de la salud en general.

 

El momento vivido afuera del Hospital de Deán Funes fue emotivo, eufórico y demostró, como tantas otras veces, la vocación que el equipo de salud tiene en su trabajo. Varias personas se animaron a tomar el micrófono en un momento específico y sin pudor ni tapujos hablaron sobre experiencias personales y sobre compañeros que tuvieron a lo largo de sus carreras. Hubo frases como “El Ministerio (de la Salud) nos mandó atados como corderos”, “Se olvidaron de nosotros” o “Hay compañeros que dejaron la vida y esto es inaceptable” que golpearon y golpearán fuerte hasta en las sillas más altas del Ministerio de la Salud y del Gobierno provincial en sí.

 

Acto seguido, todos los presentes fueron convocados a realizar una marcha alrededor del Hospital y, al unísono de “Salud unida, jamás será vencida”, repudiaron los paupérrimos salarios y jubilaciones que percibe el área de la salud.

 

Finalmente, al llegar a las escaleras del Hospital, tanto el personal de salud como así también todos aquellos que se hicieron presentes para acompañar el momento, se sacaron una foto envueltos entre los colores de la bandera argentina.

 

El equipo de la salud se cansó y dijo “Basta”.