Un hecho característico cubre de un manto oscuro la justicia de Deán Funes: la sede del poder judicial se encuentra acéfala.

¿Será ésta otra estrategia puesta en marcha por los poderosos de la política? ¿No implican estas disposiciones el desamparo al Fiscal Funes? ¿Podrán estas circunstancias permitir que algunas pruebas queden guardadas bajo la alfombra?

Sociedad 22/09/2016

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Un hecho característico cubre de un manto oscuro la justicia de Deán Funes: la sede del poder judicial se encuentra acéfala.
Curiosamente, las causas que involucran a varios funcionarios del norte de la provincia Córdoba, se encuentran estancadas desde aproximadamente un mes. Esto, debido a la falta de un respectivo Fiscal de Instrucción que continúe los procesos de investigación. 
 
Recordemos que luego de estar 25 años al frente de la Fiscalía de Instrucción de la Novena Circunscripción, el Doctor Eduardo Gómez, ya goza en la actualidad de su jubilación. El cargo desierto fue cubierto casi accidentalmente por el Fiscal de Cámara Hernán Funes.
 
El afamado Fiscal Funes, reconocido por  dirigir  varias megacausas que fueron y son escándalo provincial, lo es ahora también en los pasillos de tribunales por el característico apodo que se ha ganado debido a su constante labor. “El pulpo” Funes, como lo denotan sus colegas, de lunes a viernes se aboca a dar respuestas a todos los hechos que suceden en los cuatro departamentos que comprenden su jurisdicción, sumándose a esta tarea las respectivas investigaciones a los funcionarios sospechados de corrupción.
 
 Lo llamativo y curioso del caso, es la tardanza que se le está otorgando al concurso para el cargo de Fiscal de Instrucción. Este paso es necesario para que se pueda nombrar a un funcionario que  responda a las demandas pertinentes  y para que los actores judiciales actuales no sobrecarguen sus tareas y puedan actuar como corresponde.
 
¿Será ésta otra estrategia puesta en marcha por los poderosos de la política? ¿No implican estas disposiciones el desamparo al Fiscal Funes? ¿Podrán estas circunstancias permitir que algunas pruebas queden guardadas bajo la alfombra? Las respuestas podrían ser connotadas al transitar los pasillos de tribunales de nuestra ciudad.
 

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