La policía de la Departamental Ischilín investiga si el incendio que se produjo el viernes cerca del mediodía en un campo de Barrio 9 de Julio, fue provocado intencionalmente. 

 

El siniestro mostró llamas de más de 10 metros de altura y se aproximó demasiado a varias viviendas generando pánico. Fuentes cercanas indicaron que hay indicios que hacen sospechar de que el foco pudo ser provocado premeditadamente.  

 

ASISTENCIA

 

Por otro lado, Defensa Civil y las áreas de Desarrollo Social y de Salud municipio local trabajaron con las familias afectadas. “A pedido de los bomberos enviamos agua mineral para hidratar a las personas que estaban trabajando, inspectores para los cortes de calle y nos hicimos presente en los domicilios de las familias que en el afán de proteger su casa inhalaron humo”, informó el secretario de gobierno Jorge Arce.

 

Foto: Gustavo Adolfo Hemmerling